Riesgos biológicos

Evaluación de salud de las trabajadoras
En todos los exámenes de salud, sobre todo en el reconocimiento inicial y de forma similar en los periódicos u otros, si no se ha hecho antes, hay que valorar el estado inmunitario de la trabajadora (susceptibilidad) mediante serología si no hay certeza de inmunidad, con especial atención a las mujeres en edad fértil (posibilidad o deseo de embarazo). Se debe vacunar a las trabajadoras susceptibles si no hay contraindicaciones ya que se trata de una medida de prevención primaria altamente eficaz.

Aptitud laboral
Recordemos que según la Directiva Europea de Protección de la Maternidad la Rubéola es un riesgo absoluto, por lo que ninguna trabajadora podrá ser obligada a trabajar en un puesto con este riesgo si se encuentra en situación de embarazo.
• Las trabajadoras sin antecedentes personales claros de infección por rubéola, que no puedan acreditar una vacunación o tengan una serología negativa, no deben desarrollar su labor en áreas de alto riesgo hasta completar vacunación.
• Las trabajadoras en edad fértil sin evidencia de protección deben excluirse de las áreas de alto riesgo hasta completar vacunación.
• La posibilidad de grave afectación fetal hace necesario retirar inmediatamente a las trabajadoras embarazadas de las áreas donde pueda existir riesgo hasta confirmar su estado inmunitario.

Embarazo
         Embarazo

                                              Cuadro de Embarazo

Cuadro de Embarazo

                                                       
LA RUBÉOLA
Interesa especialmente esta enfermedad porque la rubeola se produce por un virus que puede ocasionar defectos fetales si infecta a las mujeres embarazadas, con un 40-60% de posibilidades de malformación si la infección ocurre en el primer trimestre. Las posibilidades disminuyen a un 10% en el segundo trimestre y menos en el tercer trimestre (Rubéola congénita).
¿Cómo se transmite?
El reservorio de esta enfermedad es el ser humano. La infección se transmite por contacto directo con los enfermos, a través de gotitas o secreciones de las vías nasales y de la faringe. El período de incubación de la enfermedad es de 14 a 23 días y se puede transmitir una semana antes del período de erupción y, por lo menos, cuatro días después que éste empiece. Dado que no siempre se presentan síntomas, es posible que una persona, un niño en edad escolar por ejemplo, aparentemente sano, transmita el virus.
¿Qué síntomas presenta?
En los adultos el periodo de comienzo suele durar de 24-48 horas, manifestándose como un ligero cuadro catarral, con febrícula y adenopatías (ganglios) frecuentemente detrás de la oreja. El periodo exantemático (de erupción en la piel) suele durar 2-3 días y también puede acompañarse de leve coriza y conjuntivitis. El exantema máculo-papular (erupción de manchas en la piel) puede faltar, no es confluente, se inicia detrás de la oreja diseminándose hacia el tronco, pudiendo ser pruriginoso en los adultos. Se acompaña de fiebre (en general <39oC y de corta duración) y adenopatías tras el pabellón auditivo, en la parte posterior del cuello y sub-occipitales. Las complicaciones son infrecuentes, en los adultos son más habituales (1/3 de mujeres) las poli-artritis de pequeñas articulaciones (manos, muñecas y rodillas), apareciendo dolores articulares en el 70% de los casos, durante 1-2 semanas.

La rubeola
         La rubeola

La rubeola II
        La rubeola II

TÉTANOS
Especialmente en aquellos puestos de trabajo relacionados con la FP, educación física, laboratorio, actividades extraescolares en la naturaleza etc. en los que se está en contacto con ambientes con posible contaminación (suelos, bordes cortantes, maquinaria etc.) La vía de entrada (10-20 % de casos no se encuentra la responsable) son las heridas (a veces mínimas), que se tengan o produzcan, que se contaminan con esporas (más peligrosas: por punción o desgarro, las infectadas o con cuerpos extraños, y las quemaduras). Síntomas y signos Aparece tétanos generalizado en 80% de casos. Suele haber inicialmente síntomas localizados en la zona de la herida. Es típica la afectación de los músculos masticatorios con dificultad para abrir la boca por aumento de tono muscular (trismo, 50%), faciales (risa sardónica) y cervicales. Más tarde se afecta la musculatura más distal, la musculatura proximal de los miembros, aparece rigidez abdominal, etc., apareciendo contracciones sostenidas, dolorosas y posturas características por afectación de la musculatura dorsal. Los espasmos generalizados pueden comprometer la vida del paciente al reducir la ventilación o provocar apnea o laringoespasmo. Se trata de una enfermedad poco frecuente pero con alta mortalidad.
Evaluación del estado de salud de los trabajadores expuestos
Los Exámenes de Salud deben realizarse a todos los trabajadores cuando no existe certeza de su correcta inmunización, en el momento de incorporación al puesto, cuando se añadan nuevas tareas de riesgo, periódicamente, o tras exposiciones accidentales. En todos los tipos de exámenes de salud se realizará una historia clínico-laboral dirigida. En la anamnesis deberá determinarse el estado de inmunización del trabajador. En caso de duda se tenderá a asumir que el trabajador no está suficientemente inmunizado, debiendo actuar según los criterios de inmunización previstos. Se informará al trabajador de las características de la enfermedad y de la vacunación, así como de las ventajas e inconvenientes de la vacunación y no-vacunación. Si es necesario, se programarán y establecerán claramente los procedimientos para llevar a cabo una adecuada inmunización (número de dosis necesarias, intervalos apropiados, dosis de recuerdo, etc.).


SARAMPIÓN Y OTROS AGENTES BIOLÓGICOS DE RIESGO
Debe contemplarse, como la rubeola, su capacidad de producir abortos y partos prematuros (un 20% de los casos) en las mujeres que poseen inmunidad durante el primer trimestre del embarazo. El único reservorio natural es el hombre. La fuente de exposición son las personas infectadas, principalmente niños, ya que los adultos jóvenes presentan serologías positivas en el 80-100% de los casos en nuestro medio. La enfermedad proporciona inmunidad de por vida. Se contagia desde 5 días después de la exposición hasta 5 días después de aparecer las lesiones cutáneas. La principal vía de transmisión directa es a través de las secreciones nasofaríngeas o indirectamente vía aérea por gotículas que pueden permanecer largamente suspendidas, o partículas de polvo contaminadas y secreciones espiratorias que llegan a las mucosas de conjuntiva, nariz y boca.

Otros agentes biológicos de riesgo

Trabajadoras susceptibles
Serán aquellas sin conocimiento cierto de haber padecido la enfermedad o con serología negativa, expuestas al contacto con enfermos contagiosos (especialmente niños e inmunodeprimidos en educación especial ocasionalmente) o sus muestras. No se considerará preventivo el contacto previo con enfermos y no haber desarrollado la enfermedad. En todos los exámenes de salud, sobre todo en el reconocimiento inicial y de forma similar en los de otro tipo, si no se ha hecho antes, valorar el estado inmunitario del trabajador (susceptibilidad), mediante serología, si no hay certeza de inmunidad, con especial atención a las mujeres en edad fértil (posibilidad o deseo de embarazo), así como otras posibles situaciones de especial sensibilidad. Vacunar a las trabajadoras susceptibles si no hay contraindicaciones.
• Si hay duda por parte de la trabajadora de haber padecido la enfermedad y no hay certeza del cumplimiento del calendario vacunal, se recomienda considerarla no inmune hasta la confirmación serológica.

• Serologías negativas indican que no ha habido contacto con el microorganismo y por tanto no hay protección.

• Sospecha, o certeza de riesgo de exposición, y susceptibilidad, asociadas a embarazo o posibilidad de éste, aumentan la gravedad de las posibles consecuencias de la infección. Preguntar a las mujeres si están embarazadas o desean estarlo. Informar de los riesgos a las mujeres fértiles susceptibles. Vacunar a las que acepten evitar el embarazo durante 3 meses (proporcionando anticoncepción si es necesario).
Respecto a otros agentes que puede actuar como factores de riesgo reproductor debe considerarse aquí, aunque no los desarrollemos, el virus de la Parotiditis epidémica (paperas), el de la Varicela-Zoster; que puede producir abortos y puede producir varicela congénita en el feto con una frecuencia entre 0,4-2%, con retraso psicomotor, ceguera, sordera y microcefalia. Si ocurre cinco días antes o dos días después del parto puede producir una varicela neonatal con una mortalidad en torno al 30%.

                                                             Parotiditis epidémica 

Parotiditis epidémica

Otras de actividad específica

Numerosas patologías se pueden relacionar con subsectores educativos específicos: Formación profesional, educación especial, laboratorios, ramas sanitarias, educación física, etc.

Como parte del riesgo biológico no debemos olvidar las parasitosis (especialmente la pediculosis y -más raramente- la sarna) bastante frecuentes en nuestro medio. También la Tuberculosis y la hepatitis A, en trabajo con discapacitados psíquicos y escuelas sanitarias, así como la hepatitis B y C, en escuelas de enfermería, prácticas hospitalarias, análisis clínicos etc. Las profesiones relacionadas con la veterinaria tienen riesgo de zoonosis (enfermedades transmisibles por los animales al hombre) muy diversas como la brucelosis, las infecciones por hongos en la piel, etc.

El número de lesiones deportivas, que en el caso de los docentes específicos pueden ocurrir en forma de accidente laboral son numerosas: epicondilitis, epitrocleitis, osteopatías púbicas, roturas tendinosas, esguinces y luxaciones, meniscopatías etc.