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Patologías laborales frecuentes
Introducción
En
aras a la brevedad y para no exceder el límite de la información
básica necesaria, vamos a conocer algunos de los posibles daños
laborales relacionados con determinados riesgos más o menos
presentes en las condiciones de trabajo.
No es posible plasmar todos y cada uno de los puestos de trabajo
existentes –y sus riesgos- ya que, en mayor o menor medida,
imitan muchas de las profesiones y puestos de trabajo de todos
los sectores económicos con trabajadores especializados por lo
que, en su aprendizaje práctico, pueden estar presentes riesgos
muy diferentes.
Utilizaremos las Pantallas de Visualización de Datos como
ejemplo a desarrollar, abordando lo que constituiría el
contenido del Plan de Vigilancia de la Salud, las pruebas a
realizar y la información a los trabajadores sobre las
patologías laborales relacionadas. Para otros detalles
ergonómicos y psicosociales debe consultarse la clase
correspondiente ya que la visión que ofreceremos en la presente
clase será eminentemente médica.
Pantallas de visualización de datos
La
Tabla 1 ilustra las patologías profesionales en relación con el
uso de Pantallas de Visualización de Datos. Sigue el esquema del
Plan de Vigilancia de la Salud, incluido en el Plan de
Prevención en cuanto a las actuaciones que se proponen,
especificando las técnicas que corresponde aplicar en cada caso
(cuestionarios, exploraciones generales y específicas por
aparatos, pruebas complementarias etc.)
Como se observa en la tabla siguiente, el daño laboral se
encuentra clasificado en posibles enfermedades profesionales (de
la lista en vigor) y enfermedades, síntomas y signos que
-eventualmente- pueden estar relacionados con el trabajo.
Por ser enfermedades profesionales vamos a describir someramente
el síndrome del Túnel carpiano y la Enfermedad de De Quervain,
ambas relacionadas con movimientos repetidos al trabajar sobre
el teclado y la superficie de la mesa.
Síndrome del túnel carpiano
El
síndrome del túnel carpiano es una patología específica que
afecta a la muñeca y la mano, y puede estar causado por la
repetición de un mismo movimiento bajo ciertas circunstancias o
por otros factores físicos. Se trata de un desorden en el nervio
que ocurre cuando éste recibe demasiada presión a través de los
ligamentos carpianos de la muñeca. Los síntomas más frecuentes
son el adormecimiento, hormigueo y el dolor en los dedos. El
nervio mediano proporciona sensibilidad en el lado de la palma
de la mano que corresponde al pulgar, así como a los dedos
pulgar, índice, medio y la parte del anular con cara hacia
pulgar. También proporciona movimiento a una parte de la mano.
El nervio entra en la mano entre los huesos de la muñeca
(llamados huesos carpianos) y una membrana fuerte que mantiene
unidos a estos huesos (el ligamento carpiano transverso). Este
espacio es llamado también túnel carpiano y debido a que el
trayecto es rígido, la inflamación de cualquiera de los tejidos
de esta zona puede causar compresión en el nervio (a este
fenómeno también se le denomina atrapamiento del nervio).
Son muchos los factores que intervienen en su origen, como el
desgaste y desgarro de los músculos y tendones por dislocaciones
o fracturas de la muñeca; artritis; movimientos repetitivos, y
retención de líquidos durante el embarazo. Todos estos
trastornos pueden afectar al nervio que pasa por el espacio del
túnel carpiano.
Síndrome del túnel carpiano |
Síndrome del túnel carpiano 2 |
Síndrome del túnel carpiano II
¿Los teclados de los ordenadores pueden causar este síndrome?:
Los teclados, por sí solos, no son la causa única del síndrome.
No obstante, los movimientos repetitivos de cualquier tipo,
especialmente aquellos que requieren esfuerzo o permanecer
durante mucho tiempo en la misma posición, pueden favorecer su
desarrollo (profesores de música, de educación física etc.). La
razón última de la asociación entre esta patología y los
teclados de ordenador no ha sido comprobada definitivamente en
varios estudios recientes.
Enfermedad De Quervain
Esta
tendinitis se genera por irritación e inflamación de los
tendones que se encuentran en el borde del pulgar hasta la
muñeca (Figura 3). La irritación causa que el revestimiento del
compartimiento de alrededor de los tendones se inflame,
cambiando así su forma; esto hace difícil a los tendones moverse
como debieran. La inflamación puede causar dolor y sensibilidad
en el borde del pulgar de la muñeca, que usualmente se
manifiesta al tratar de hacer un puño, agarrando objetos o
rotando la muñeca.
El síntoma central es dolor sobre el lado del pulgar de la
muñeca. Este puede aparecer gradualmente o en forma brusca. Se
siente en la muñeca pero puede irradiarse hacia el antebrazo.
Normalmente el dolor empeora con el uso de la mano y el pulgar,
especialmente al tomar objetos con fuerza o al girar la muñeca.
Es posible evidenciar inflamación sobre el lado del pulgar de la
muñeca, también puede haber un quiste en esta zona.
Ocasionalmente puede ocurrir que el pulgar se engancha al
moverlo. Debido al dolor e inflamación, durante actividades como
hacer una pinza, puede haber dificultad en mover el pulgar y la
muñeca. La irritación del nervio que está encima de la vaina
tendinosa, puede causar adormecimiento en la parte de atrás del
dedo pulgar e índice.
Alteraciones de la visión
Interesa conocer algunos de los términos relacionados con las
molestias oftalmológicas que eventualmente pueden producirse
dentro de los cuadros de fatiga sensorial relacionados con la
exposición a PVDs. Hay que considerar que muchos de estos
síntomas o signos pueden tener orígenes bien diferentes a lo
laboral, aunque deben ser siempre valorados suficientemente por
el médico del Trabajo en cada caso según la exposición:
DEFINICIÓN
Fatiga visual:
Modificación funcional, de carácter reversible, debido a un
exceso en los requerimientos de los reflejos pupilares y de
acomodación-convergencia, a fin de obtener una localización fina
de la imagen sobre la retina. La resultante del funcionamiento
excesivo del órgano, será la lógica disminución del poder
funcional junto a la aparición de sensaciones varias, que dicha
disminución comporta.
Las molestias referidas en los trabajos de investigación,
ordenadas por frecuencia de aparición, son:
Imagen |
Alteraciones de la visión II
En
relación con síntomas o signos oculares se observa:
• Prurito: Sensación de picor en los ojos (en ocasiones quemazón
o ardor).
• Epifora: Lagrimeo espontáneo, no emocional, de ambos ojos.
• Conjuntivitis tarso-bulbar: Inflamación y enrojecimiento de
los revestimientos (mucosas) que tapizan exteriormente el globo
ocular y el interior de los párpados.
• Síndrome del ojo seco: Déficit de la producción fisiológica de
lágrimas que humidifican y limpian la superficie ocular, prurito
y fotofobia. Se ha demostrado que la tarea de lectura y el uso
de PVDs disminuyen la frecuencia del parpadeo. El aire muy seco
y frío, con humo, o cargado de otros contaminantes o de iones
positivos, también favorece el desecamiento de las lagrimas.
Todos estos factores pueden desencadenar, en algunas personas,
la sequedad ocular y las queratitis (alteraciones de la cornea).
• Blefaritis: Inflamación e infección –habitualmente- secundaria
a manipulación de los párpados.
Nota: No definimos otras como las alteraciones de color y la
visión borrosa por su obviedad.
En relación con los trastornos oculares relacionados con la
acomodación visual:
• Diplopía transitoria: Imagen doble temporal al intentar
enfocar la visión.
• Astenopia de acomodación y de convergencia: Ver es una
actividad del organismo que precisa de la conjunción de
múltiples factores entre los que destaca una adecuada agudeza
visual. Sin embargo, si en la interrelación de todas las
funciones involucradas en el acto de ver, una o varias fallan,
la agudeza visual podrá ser normal pero la visión no será
confortable. Estos síntomas se conocen con el nombre de
Astenopia.
• Fotofobia: Molestia anormal ante la luz que obliga a ocluir
los párpados para defenderse y huir de ésta.
Fatiga física o muscular
DEFINICIÓN
Disminución de la capacidad física del individuo debida, bien a
una tensión muscular estática, dinámica o repetitiva, bien a una
tensión excesiva del conjunto del organismo o bien a un esfuerzo
excesivo del sistema psicomotor (musculo-esquelético)
En relación con la fatiga muscular podemos observar:
• Occipitalgia: Dolor por tensión muscular sobre la zona
posterior del cráneo, en la nuca, que no irradia hacia el cuello
ni hacia otras zonas de la cabeza.
• Cervicalgia: Dolor en cualquier segmento del cuello que puede
irradiar o no hacía el cráneo, hacia el segmento de la columna
dorsal o hacia los brazos.
• Dorsalgia: Dolor en cualquier segmento de zona alta y media de
la espalda que puede irradiar o no hacía el cuello, hacia el
segmento inferior de la espalda (columna lumbosacra) o hacia los
brazos.
• Lumbalgia: Dolor en la zona baja de la espalda que puede
irradiar hacia los glúteos, las extremidades inferiores y
–ocasionalmente- al segmento medio de la espalda.
Lumbalgia |
Epicondilitis |
Diafonías profesionales
DEFINICIÓN
La vibración de las cuerdas vocales al pasar el aire espirado a
través de las cuerdas vocales produce la voz. La voz normal
(eufónica) posee unas características que son: la intensidad, el
tono y el timbre. Cualquier alteración de éstas, de diferentes
orígenes, da lugar a una Disfonía. Cuando la fonación no es
posible aparece la ausencia total de voz o Afonía.
Causas de las disfonías
1. Funcional: son trastornos que sólo alteran la función de la
laringe y que desaparecen cuando ésta se usa en forma correcta.
Aquí estarían las profesionales en el sector docente, cantantes
actores, comunicadores, etc..
2. Orgánica: La laringe o algún órgano adyacente presentan
alteraciones que modifican las características de la voz. Los
síntomas no dependerán del uso correcto o incorrecto que se haga
de ésta.
3. Disfonías por lesiones asociadas o Mixtas: Primero hay un mal
uso de la voz y luego, al continuar en el tiempo, se produce una
lesión orgánica (nódulos, pólipos, edema de Reinke, granuloma de
contacto).
4. Disfonías de causa Psiquiátrica: Esquizofrenia, Trastornos
bipolares etc. Los síntomas y signos habituales,
independientemente de su causa son:
§
Carraspeo.
§
Dolor al hablar.
§
Punzadas en la zona anterior o lateral del cuello.
§
Fatiga al hablar.
§
Voz ronca.
§
Sensación de pérdida de voz al acabar el día.
Alteraciones músculo esqueléticas
POSTURA FORZADA Y/O SOSTENIDAS Y CARGA MANUAL. INFLUENCIA DE LAS
POSTURAS SOSTENIDAS EN LA
INSUFICIENCIA VENOSA
Existen alteraciones ya descritas dentro de la exposición a
PVDs- que tienen que ver con la fatiga muscular que afecta a
diferentes segmentos de la columna vertebral en relación con el
mantenimiento de la sedestación, la acomodación visual y el
trabajo con ratones y teclados durante periodos largos de
tiempo. Las posturas forzadas comprenden las posiciones del
cuerpo fijas o restringidas, las posturas que sobrecargan los
músculos y los tendones, las posturas que cargan las
articulaciones de una manera asimétrica, y las posturas que
producen carga estática, sostenida, en la musculatura.
Consideramos como postura sostenida, e inadecuada, la
bipedestación prolongada cuando se produce realmente en el
trabajo, y como carga manual, el levantamiento repetido de
niños, por su corta edad o por sus condiciones psicofísicas.
Aunque no existen criterios cuantitativos para distinguir una
postura inadecuada, o cuánto tiempo puede adoptarse una postura
sin riesgo, es evidente que la postura es un efecto limitador de
la carga de trabajo en el tiempo, o de la efectividad de un
trabajador. La bipedestación prolongada puede producir molestias
y dolor en zona lumbosacra (lumbalgia), en caderas, rodillas,
tobillos y pies, así como empeoramiento de las condiciones del
retorno venoso sanguíneo (insuficiencia venosa, varices, piernas
pesadas, picor etc.) Ver Figura 5.
Si existen defectos ortopédicos en los pies (cavo, plano, equino
etc.) la fatiga músculo-esquelética puede potenciarse. La carga
manual inadecuada o con sobresfuerzo puede producir
–significativamente- problemas de dolor dorso-lumbar y
lumbosacro, por contractura muscular o por afectación del disco
intervertebral (lumbalgia, lumbociatalgia, hernia discal etc.)
así como lesiones en miembros superiores, cuello o cintura
escapular.
Psicopatología
No nos
referiremos a diferentes cuadros que han sido tratados en los
capítulos de psicosociológica correspondientes (síndrome del
quemado, acoso laboral etc.) La sintomatología psicosomática
correspondiente a la carga mental (fatiga psíquica) en la
utilización de PVDs ya ha sido tratada someramente en esta misma
clase. La incidencia y prevalencia de alteraciones psíquicas es
relevante en todas las series estudiadas. Básicamente se
describen cuadros de ansiedad, depresión de origen laboral y
cuadros combinados de ansiedad-depresión. Nos limitaremos a una
breve descripción médica de éstos.
LA DEPRESIÓN
DEFINICIÓN
Depresión viene del latín “depressio” (hundimiento). El paciente
se siente hundido con un peso sobre su existencia. Es un
trastorno afectivo que varía desde: bajas transitorias del
estado de ánimo que son características de la vida misma, hasta
el síndrome clínico, de gravedad y duración importante con
signos y síntomas asociados, marcadamente distintos a la
normalidad.
Trastorno depresivo mayor. No todos experimentan la
depresión de la misma manera, los síntomas varían según las
personas. La depresión puede ser calificada como leve, moderada
o grave dependiendo de la cantidad y gravedad de sus síntomas.
Psicopatología II
Síntomas de la Depresión
• Estado de ánimo triste, ansioso o "vacío" en forma
persistente.
• Sentimientos de desesperanza y pesimismo.
• Sentimientos de culpa, inutilidad y desamparo.
• Pérdida de interés o placer en pasatiempos y actividades que
antes se disfrutaban, incluyendo la actividad sexual.
• Disminución de energía, fatiga, agotamiento, sensación de
estar "en cámara lenta."
• Dificultad para concentrarse, recordar y tomar decisiones.
• Insomnio, despertarse más temprano o dormir más de la cuenta.
• Pérdida de peso, apetito o ambos, o por el contrario comer más
de la cuenta y aumento de peso.
• Pensamientos de muerte o suicidio; intentos de suicidio.
• Inquietud, irritabilidad.
• Síntomas físicos persistentes que no responden al tratamiento
médico, como dolores de cabeza, trastornos digestivos y otros
dolores crónicos.
Trastorno distímico
Las características asociadas al trastorno distímico son
parecidas a las de un episodio depresivo mayor. Es un tipo de
depresión menos grave, incluye síntomas crónicos (a largo plazo)
que no incapacitan tanto, pero sin embargo interfieren con el
funcionamiento y el bienestar de la persona. La característica
esencial de este trastorno es un estado de ánimo crónicamente
depresivo que está presente la mayor parte del día de la mayoría
de los días durante al menos 2 años. Muchas personas con
distimia también pueden padecer de episodios depresivos severos
en algún momento de su vida. Varios estudios sugieren que los
síntomas más frecuentemente encontrados en el trastorno
distímico son:
Síntomas de la Distimia
• sentimientos de incompetencia
• pérdida generalizada de interés o placer
• aislamiento social
• sentimientos de culpa o tristeza referente al pasado
• sentimientos subjetivos de irritabilidad o ira excesiva
• descenso de la actividad, la eficiencia y la productividad
Psicopatología III
Trastorno afectivo bipolar
El trastorno afectivo bipolar produce cambios del ánimo
patológicos de manía (fases de ánimo elevado con exaltación
emocional) a depresión, con una tendencia a recurrir y a
desaparecer espontáneamente. Tanto los episodios maníacos como
los depresivos pueden predominar y producir algunos cambios en
el estado de ánimo, o los patrones de cambios del estado de
ánimo pueden ser cíclicos, comenzando a menudo con una manía que
termina en una depresión profunda. A algunas personas se las
denomina cicladores rápidos porque su ánimo puede cambiar varias
veces en un día. Otros presentan lo que se llama "estados
mixtos", donde los pensamientos depresivos pueden aparecer en un
episodio de manía o viceversa.
Causas de la Depresión
No existe una sola causa para la depresión. La depresión puede
estar causada por uno o varios factores. Algunas personas tienen
mayor probabilidad de tener depresión que otras. Hay diferentes
razones que intentan explicar esta predisposición: Herencia,
factores bioquímicos cerebrales, situaciones estresantes,
estacionalidad, determinado tipo de personalidad, enfermedades
etc. Las depresiones de origen laboral significarían que en el
desarrollo de la enfermedad existe una fuerte referencia a
situaciones que generan estrés en la actividad profesional,
aunque nunca se da esta circunstancia en forma absolutamente
aislada de las demás causas.
SÍNDROMES RELACIONADOS CON LA ANSIEDAD
DEFINICIÓN
Lazarus (1976), tratando de superar las definiciones de
ansiedad en términos de estímulo o respuesta, predominantes
hasta esa fecha, la define como una relación particular entre el
individuo y el entorno que es evaluado por éste como amenazante
o desbordante de sus recursos y que pone en peligro su bienestar.
La ansiedad es un fenómeno que se da en todas las personas y
que, bajo condiciones normales, mejora el rendimiento y la
adaptación al medio social, laboral, o académico. Tiene la
importante función de movilizarnos frente a situaciones
amenazantes o preocupantes, de forma que hagamos lo necesario
para evitar el riesgo, neutralizarlo, asumirlo o afrontarlo
adecuadamente. Por ejemplo, nos ayuda a estudiar si estamos
frente a un examen, estar alerta ante una cita o una entrevista
de trabajo, huir ante un incendio, etc. Sin embargo, cuando
sobrepasa determinados límites, la ansiedad se convierte en un
problema de salud, impide el bienestar, e interfiere
notablemente en las actividades sociales, laborales, o
intelectuales. Puede limitar la libertad de movimientos y
opciones personales. En estos casos no estamos ante un simple
problema de "nervios", sino ante una alteración. Existen varios
tipos de trastornos por ansiedad cada uno con sus
características propias.
Psicopatología IV
Ataque o crisis de Pánico
También llamada crisis de angustia o ansiedad.: Episodio de
ansiedad aguda con miedo o malestar intensos, acompañado de
alguno de los siguientes síntomas, que suelen aparecer
bruscamente y alcanzar su máxima expresión en los primeros 10
minutos:
§
Palpitaciones
§
Elevación de la frecuencia cardiaca
§
Sudor
§
Temblores
§
Sacudidas
§
Sensación de ahogo o falta de aliento
§
Sensación de atragantarse
§
Opresión o malestar en el pecho
§
Náuseas
§
Molestias abdominales
§
Inestabilidad
§
Mareo
§
Sensación de desmayo
§
Sensación de entumecimiento
§
Hormigueo
§
Escalofríos o sofocaciones
§
Percibir las cosas o percibirse a sí mismo de forma extraña
§
Miedo a morir, volverse loco o perder el control
A pesar de que para hacer un diagnóstico de crisis de ansiedad
suele ser suficiente un relativamente pequeño número de síntomas
de las reducida lista anterior, en la práctica la variabilidad y
diversidad de estos síntomas es mucho mayor, pudiendo afectar y
alterar un gran número de sistemas corporales, lo que llega a
confundir aún más a la persona que lo sufre. No necesariamente
debe existir una situación amenazante o un desencadenante claro,
pudiendo encontrarse la persona más o menos tranquila en los
momentos previos o incluso dormida. Además de aparecer algunos
de los síntomas corporales de los listados anteriores y que
varían de persona a persona, este estado va acompañado de una
intensa sensación de peligro, muerte inminente y la imperiosa
necesidad de pedir ayuda o escapar. En general las personas que
sufren una crisis de angustia la describen como un miedo
intenso, con sensación de estar a punto de morir o sufrir un
infarto o "derrame" cerebral, o bien perder el control o
"volverse loco". Esta sensación, acompañada de los síntomas
corporales que a veces son de gran intensidad, hace que la
persona tienda a escapar como sea de la situación o lugar donde
se encuentra y a veces buscar ayuda médica de urgencia. Como la
crisis llega a su pico máximo aproximadamente a los diez
minutos, en caso de acudir a urgencias, cuando llegan al
servicio, los síntomas se han calmado mucho o han desaparecido,
no encontrándose anomalías cuando son explorados. No es
infrecuente que a pesar de haberse reducido la intensidad de los
síntomas, la persona quede en un estado de abatimiento,
cansancio o desgana que puede durar incluso durante horas hasta
que se recupera.
Psicopatología V
Trastorno de Ansiedad Generalizada
La ansiedad generalizada se presenta de forma continua y no con
picos o episodios de crisis. La característica principal es un
estado mantenido de tensión y nerviosismo con preocupaciones en
torno a situaciones o acontecimientos pronosticados como
desfavorables.
Temores típicos son los relativos a accidentes, enfermedades,
dificultades económicas, laborales o familiares, sin guardar una
relación directa con la realidad exterior objetiva ni ser
reflejo únicamente del miedo a la aparición de una eventual
crisis de angustia o sus consecuencias. La persona está
nerviosa, de mal humor, irritable e insatisfecha.
La tensión mantenida puede resentir los músculos generando
dolores, sobre todo en espalda, cabeza y cuello. Los dolores de
cabeza son relativamente frecuentes en forma de presión, bien en
la zona de la nuca o en la parte frontal mientras que otras
veces es un dolor continuo de carácter pulsante.
Aparecen, además, síntomas corporales como el aumento de la
sudoración, sobre todo en las manos, facilidad para ponerse
rojo, sequedad de boca o por el contrario mucha salivación,
molestias en la garganta, nauseas, eructos, molestias de
estómago, necesidad de orinar con frecuencia, ligera diarrea,
temblor y agitación interna.
No es infrecuente que por el estado de hipervigilancia continua
la persona presente dificultades de sueño, así como sensación de
cansancio y fatigabilidad durante el día. Las alteraciones del
apetito pueden oscilar desde su aumento a la disminución, lo
mismo que puede observarse en relación con el impulso sexual.
También las capacidades mentales se resienten, apareciendo con
frecuencia dificultades para mantener la atención y
concentración lo que favorece la distracción, así como pueden
existir algunas dificultades de memoria.
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